Queso blanco

1.- Cubre un colador grande con un trozo de manta de cielo.

2.- Coloca la leche dentro de una olla grande a fuego suave. Calienta, moviendo frecuentemente, hasta que alcance los 85 ºC (revisa constantemente con un termómetro de cocina).

3.- Agrega la sal, revuelve y, sin dejar de mover, incorpora poco a poco el vinagre de manzana. En cuando la cuajada empiece a separarse del suero, deja de agregar vinagre. (Puede que necesites más o un poco menos de vinagre).

4.- Retira la cuajada de la olla con una espumadera y colócala sobre la manta en el colador. Cubre con la misma manta. Llena un recipiente pequeño con agua y colócalo encima de la cuajada tapada, presionando un poco el queso. Deja escurrir de 1 a 3 horas. Entre más tiempo lo dejes reposar, más seco quedará el queso.