Mole de sacristía
Este mole no es dulce y es una excelente alternativa para quienes no pueden comer frutos secos. Acompáñalo con arroz blanco.
Ingredientes
Pasos
1.- Coloca el pollo, cebolla y ajo en una olla. Cubre con agua y agrega sal al gusto. Deja que suelte el hervor a fuego alto, reduce la flama, tapa y cocina a fuego lento hasta que la carne esté suave. Una vez listo, separa la carne y reserva 1 litro de caldo.
2.- Asa los chiles chipotle, ancho y pasilla en un comal a fuego bajo, volteándolos frecuentemente hasta que cambien de color. Cuida que no se quemen. Retira del comal y reserva.
3.- Asa la cebolla y el ajo, volteándolos de vez en cuando hasta que tomen un color dorado.
4.- Muele en la licuadora los 3 tipos de chiles junto con la cebolla, el ajo y un poco de caldo de pollo. Reserva.
5.- Licúa aparte los tomates verdes.
6.- Calienta el aceite en una cazuela a fuego medio. Vierte los chiles licuados y cocina hasta que la grasa empiece a brotar por encima. Añade los tomates licuados, revuelve bien y deja cocinar durante 10 minutos, hasta que la salsa esté espesa.
7.- Sazona con las semillas de cilantro y comino; añade el caldo y las piezas de pollo y rectifica la sazón. Deja hervir otros 3 minutos. Sirve inmediatamente.